Todos dicen cosas
Todos
dicen sus ideas a viva voz, sin miedo y con vehemencia, y así todos te dicen
qué debes hacer, mas nadie pone un céntimo en tu mano para comer.
Todos
te dicen cómo y cuándo debes enfrentarlo todo, mas nadie se detiene para entender
tu pensar ni el porqué de las penas de tu querer cuando te quedas callado
mirando el horizonte, apenas respirando con el corazón en las manos sangrando las
tristezas de un ayer que se quedó un día esperando las luces del alba.
Todos
dicen que saben cómo te sientes en cada momento, mas nadie ha hecho por sí mismo
lo que te piden hacer a Ti con tu vida.
Todos
dicen cosas, cosas para pensar, para ver, para decir y para hacer, mas nadie se
queda a tu lado cuando tienes hambre, cuando sientes frío, cuando te da sueño y
necesitas el cariño de un abrazo para dormir en paz.
Todos
dicen cosas, cosas que no hacen y sin embargo las siguen diciendo como si las
hicieran, mas nadie se juzga a sí mismo primero, quizás porque es más fácil
juzgar a los demás, sobre todo cuando los demás guardan en el bolsillo los
secretos de su pasado, de los que nadie hoy quiere hablar.
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