Aprendamos a vivir

Mirando sin ver las vueltas que da la vida empiezas a sentir el peso acumulado del paso del tiempo, que una vez fue pasajero y hoy se ríe del viento que alborotó los papeles de tu escritorio, mientras el silencio es testigo de todo lo que tu mente piensa.

Un día el sol calienta la calle para derretirla y al siguiente llueve a cántaros noche y día. Es así el clima del trópico, de impredecibles misterios, entre nubes un cielo de colores celestes como la juventud que no entiende que mañana todo será diferente, y es cierto.

Hay que borrar la tristeza de la agenda del día, igual corren las horas que traen alegrías, si el tiempo no vuelve ¿para qué dejar vivas las penas que aburren los labios y mojan la mirada? Si no encontramos motivos para reír simplemente será suficiente pensar en vivir.

Aprendamos a vivir de una manera diferente, no como quiere el destino, no como quisiera alguien que no sabe de Uno, aprendamos a vivir para Nosotros mismos, con la paz divina que da la alegría de sentirnos completos, para poder amarnos a diario sin miedo y ser verdaderos.

Cuando sientes la energía de un alma llena de bondad, que en la mirada desvela amor puro y en las palabras enseña toda la verdad, podemos pensar en vivir de una manera distinta, de una forma real, sin excusas ni pretextos, sin prejuicios ni perjuicios.

2-Ago/2019 (Serie El Gato y Yo)

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