La visita del destino

El día como que quiere estar triste

pero no, no lo vamos a dejar.

El alba de gris temprano se viste

de unas nubes que no saben qué harán.

Ya he llamado al sol, que no se resiste,

para que traiga su luz a brillar.

Ya no hay juego de palabras, no vale,

el destino se impone con firmeza

poniendo de frente los comensales,

las miradas sutiles son las dueñas

y la visita del destino sabe,

hoy los atrevimientos quedan fuera.

Cuando un día el destino te visita

quizás te sorprenden las emociones

sin sospechar a quién necesitas,

y conocer es querer, sin razones,

te alimenta el alma con vibraciones

y conoces si quieres, sin temores.

Sin expectativas y sin rencores,

así empezar desde cero, curiosos,

sin albergar fatídicos temores,

sin recordar momentos dolorosos,

olvidando pasados sinsabores

para crear momentos primorosos.

La visita del destino todo es,

chispa corta y fresca motivación,

nacer otra vez, volver a querer,

aliento para un triste corazón

que anhela el cariño y la comprensión

de paz cotidiana, de amar con Fe.

Larga, abrupta, es la senda del camino,

un pesado equipaje, un largo viaje,

primero un paso, otro después, sencillo,

la frente en alto no importa qué pase,

con ánimo nos visita el destino

y quizás pronto hasta el amor renace.

8-Abr/2019 (Serie Bella Señora)