Alegría cotidiana

De pensarla nomás se me alegra la vida, con esa sonrisa y sin miedos es Ella la Persona Única que vive alegre en mi pensamiento.

Al despertar mi día toma color, no importa que no haya saludo el sol, su imagen divina ilumina mi habitación sin abrir los ojos.

No nos hace falta mucho hablar, aún en la distancia Ella y Yo sentimos la energía de la bondad que resuelta fluye entre los Dos.

Nada es poco, nada es mucho, entre Nosotros todo es suficiente para sonreír mirándonos y vivir feliz el momento, hacerlo mágico.

Las miradas tiernas y parlanchinas achican la distancia cuando nos encontramos, y llegan los abrazos apretados que nos abrigan el pecho y la espalda, al contacto de los cuerpos se va despertando con temblor en los labios el deseo natural de hallar un beso.

Si acaso es miércoles ó es domingo, si es mañana ó acaso atardecer, nos da lo mismo para hacer el amor sin confusión, pues los anhelos que viven bajo la humedad de la piel para gozar del placer al amarnos no dependen del calendario ni se rigen por horario.

Si pudiera resumir en una frase cómo Ella me hace sentir, sin mucho pensarlo diría que es mi alegría cotidiana, porque Ella me alegra cada momento del día y de la noche, incluso cuando no está a mi lado me sonrío, pues de día la pienso y de noche la sueño.

Ella es muy bonita de cara y luce una cabellera de lujo, ojos preciosos y tiernos labios, una piel sensible muy suave cubre su espectacular cuerpo de mujer y para gozo todo lo demás es sensacional, mas sus atributos más hermosos viven dentro de su corazón.

La bondad pura de su alma me enamoró justo al conocerla, sincera de mirada y muy clara de palabra, late amor verdadero en su corazón y su pasión por vivir en armonía con su entorno es auténtica, su sano juicio me da paz, azul, es Ella mi alegría cotidiana.

5-Oc/2021 (Serie Persona Única)