Muchas cosas

Pensando hoy me quedo, sereno. Muchas cosas habían perdido sentido para Mí, muchas cosas que ya no me interesaba hacerlas de nuevo, muchas cosas simplemente dejaron de gustarme, muchas cosas cotidianas que ignoré y el interés le perdí. Hasta que te conocí.

Tomar un café en vaso encerado a media tarde y saborearlo plenamente entre la sonrisa y tu mirada conversando de todo y de nada.

Beber una cerveza boca en lata al final del día para sentir la espuma fresca en los labios y reír sin parar como un adolescente.

Ir al mediodía a comer chicharrones con tostones y carnita frita, sin decirle a nadie, y menos al cardiólogo, seguir trabajando.

Pasarnos una tarde de sábado desnudos en la cama viendo televisión sin mirar los programas, contando lunares y descubriendo formas de cuidarnos, tomando el vino varietal italiano de una sola copa, boca con boca probando los sabores divinos de la intimidad.

Caminar tomados de manos por las calles peatonales de la vieja ciudad mirando las palomas picando cualquier semilla en el suelo.

Ir al cine cualquier tarde de otoño a ver una película de acción y ficción, cual niños, comer palomitas de maíz, tomar refresco.

Habíamos olvidado cómo compartir muchas cosas de la vida cotidiana, que nos hacen dichosos, pero nunca es tarde si queda bondad.

Por esas y tantas otras cosas que no recordaba cómo hacer, ó mejor dicho, con quién disfrutar, fui queriéndote cada día un poco más, también dejándome querer. Así fuimos sumando momentos sencillos que nos han ido enseñado cuán importantes son los detalles.

19-Sep/2021 (Serie Madrigal)

Comments

Popular posts from this blog

Me deleito con tu personalidad

Maroteando

El Gato entendió