Cuando hacemos el amor

A veces pienso que estoy soñando cuando siento que te estoy amando y tu respirar y el mío se encuentran entre besos que no miden la distancia de los labios al ritmo de cada movimiento, y la pasión prevalece, y el placer crece sin medida ni control, y todo queda luego en su lugar.

Algunas veces pienso que a tu lado estoy soñando, pues es una realidad diferente que me colma de gratas emociones, me deja en paz y más con la satisfacción mutua puesta de manifiesto, sin competencia somos complemento y todo pasa en su justo momento sin un estrés de cumplimiento.

Cuando hacemos el amor somos eso, dos humanos mortales fielmente enamorados, con sana madurez ejercemos plenamente la cuestión de armarnos con loca pasión, de entregarnos tal cual como es cada quien para disfrutar cada instante de la mejor manera, además de finos mimos de cariño.

Cuando hacemos el amor brilla la magia, el destino se engalana y sujeta al tiempo, el reloj detiene sus manijas y espera en silencio el feliz desenlace de la pasión antes de seguir marcando las horas, los placeres vividos adornan la memoria, le queda al cuerpo un cansancio fugaz.

Cuando hacemos el amor sentimos el real motivo de la felicidad, con intensidad nos ocupa el arte de amar y luego con bondad vivimos en paz, conformes quedamos con la esperanza de continuar amándonos cada vez más. Cuando hacemos el amor somos mucho más que dos cuerpos, somos amor.

18-May/2022 (Serie Amor del bueno)