Dos Pajarillos
♣ Chui-Chui-Chui Pajarillo, aquí estoy.
♦ Hey! Volando voy.
♣ Hey! Dos Pajarillos parecidos tenemos hoy. Hola, hola. ¿Cómo están ustedes?
♣ Mi buen Señor, aquí ando con un primito grande que estoy entrenando para volar por estos lares, entre humanos y mascotas.
♣ ¡Oh! Muy bien Pajarillo, me alegro mucho que hayan venido a nuestro encuentro. ¿Y cómo te llaman a ti primito grande? ¿Eh?
♦ Pues el primito grande no sabe hablar todavía idioma humano, estamos en eso, aunque entiende bastante si le habla despacio.
♣ Bueno, bueno, bueno... Confío que con tus enseñanzas pronto estará conversando. Vengan, que les he traído un poco de Yaroa, a ver si les gusta, y también traje semillas para aves que compré en la veterinaria. Vamos a ponernos debajo de aquel árbol, estaremos tranquilos alejados de la gente.
♦ ¡Muchísimas gracias mi Señor! Mucho se lo agradecemos, en estos últimos días ha llovido y no hemos podido comer bien, con la poca comida que conseguimos le damos prioridad a las crías y a los mayores. Aquí empatamos.
♣ Vengan, vayan picando semillas en lo que Yo desmenuzo la Yaroa, que esta tiene bastante mayonesa y kétchup, y creo que esos químicos no les van a gustar mucho a ustedes, no se me vayan a indigestar con tanto condimento mis nuevas amistades.
♦ Sí, sí, las semillitas están bien ricas. A nosotros nos da mucho trabajo conseguir alimentos secos; frutas sí hay muchas por aquí cerca, pero somos tantas aves que hay que andar rápido para alcanzar a comer.
♣ Pues, aprovechen ahora y coman bien.
♦ Sí, bien mi Señor.
♣ Me imagino que no es nada fácil la vida silvestre. Y... deja que te pregunte Pajarillo, ¿cómo se comunican las aves? Porque de alguna manera se han de hablar y quizás se alertan de los peligros del ambiente. ¿No?
♦ Pues sí, tenemos un lenguaje de silbidos básico, y algunas aves saben más cantos que otras, pero en general nos entendemos.
♣ Oye, el Primito no habla, pero come de manera responsable. Dile que no se apure, que hay suficiente alimento.
♦ Je, je. ¡Sí! El pobre tenía un par de días pasándola mal.
♣ Oye algo Pajarillo, incluso les puedo dejar una cantarita con semillas por aquí, puesta en una rama alta, para que otros familiares y amigos también vengan a comer cuando puedan.
♦ Wao! Eso sí que sería genial mi Señor.
♣ OK, déjame ver qué consigo para hacer un comedero. Pero tenemos que ponerlo en un sitio discreto, para que no vengan otros incumbentes a comerse estas semillitas.
♦ Sí claro, de igual manera nosotros sólo le diremos a los nuestros dónde ir a comer. Cada quien tiene que cuidar su familia.
♣ Mira Pajarillo ¿por que tu primito está agachado con los ojos cerrados? ¿Le habrá caído mal la Yaroa ó acaso se le atrabancó una semillita en la garganta? Mira, mira...
♦ No, no, mi Señor, Usted tranquilo, él está dando gracias al cielo y al sol por permitirle comer ese alimento. Algo así como lo que ustedes los humanos llaman rezar.
♣ ¡Sopla! Veo cuánta bondad se pone de manifiesto. La verdad que siento que tengo mucho que aprender de ustedes Pajarillo. ¡Qué suerte he tenido al encontrarte, de conocerte!
♦ Caramba mi Señor, Usted siempre tan amable, créame que la buena suerte ha sido toda mía. Amistad y comida, eso está bien.
♣ Bueno, pues entonces dichosos somos ambos de habernos encontrado. Y dile a tu Primito que siga estudiando el idioma para que podamos conversar en alguna ocasión.
♦ ¡Claro que sí mi Señor! Poco a poco él va aprendiendo. Para las aves no es tan fácil llegar a hablar, pero sepa que todo se logra con determinación y paciencia, y con Fe.
♣ Así es Pajarillo, y me gusta tu manera de pensar.
♦ Mi padre era un ave de vida práctica, me decía que más se aprende con los daños que con los años, él iba siempre batallando hasta que perdió la respiración, así, siempre luchando para llevarnos el alimento al nido.
♣ Tu padre te enseñó lo más importante para tu futuro Pajarillo, valor para creer en ti y coraje para enfrentar los peligros del vivir.
♦ Mi Señor el cielo avisa que pronto viene lluvia, se pondrá todo oscuro, ya debemos regresar a casa, además el Primito todavía no se ubica bien por esta zona.
♣ Yo no veo al cielo avisando, pero si tú lo dices seguro sabes bien lo que me cuentas.
♦ Sí, desde pichón aprendí a escuchar el cielo, nunca mienten las nubes y el viento.
♣ Muy bien Pajarillo, a volar entonces. La semana próxima vengo mejor preparado y ojalá tengamos tiempo para conversar más.
♦ Muchas gracias mi buen Señor, nosotros volamos en paz, que su Dios le bendiga con buena salud y le permita vivir muchos años. Mis parientes le agradecen.
♣ ¡Amén, amén! Adiós pajarillos, vayan con calma y cuidado.
9-Ago/2021 (Serie Pajarillo)
Comments
Post a Comment