Morderte hoy

Ojalá hoy me dejes morderte los dedos, todos, aún estén tus uñas pintadas, los quiero uno a uno con santa calma para chuparlos con cuidado, de cada pie y cada mano, para Mí son sabrosos todos.

Ojalá hoy me dejes morderte las orejas, despacio para que no te duela, acaso sin que las cosquillas de vergüenza te asalten, para que así oigas de cerca cómo te busca y te encuentra mi lengua.

Ojalá hoy me dejes morderte los labios, los de tu boca, esos que de verlos me provoca besar a ojos cerrados sin cansancio, más con mi lengua traviesa poder disfrutar los sabores de tu paladar.

Ojalá hoy me dejes morderte los pezones preciosos de tus lindos senos, lamerlos por doquier y sentir cada pliegue de tus areolas, disfrutar el sabor que tienen guardado, el que había olvidado.

Ojalá hoy me dejes morderte las nalgas, con aleatorios mordiscos por lo ancho y lo largo de tus caderas, sutil por cada cachete y llegar luego hasta el final, donde todo es prohibido, y parar.

Ojalá hoy me dejes morderte el clítoris, la joya más preciada de tu desnudez, por largo rato chuparlo de arriba hasta abajo y de lado a lado, despacio entre dientes, nariz y lengua formando círculos de radio infinito dentro de tu vulva, hasta que tus gemidos delaten al clímax, y sentir el secreto sabor de tu orgasmo en mi boca, ante tu mirada incrédula porque te gusta cada vez más.

Y porque te quiero a Ti querer Contigo hacer el amor a diario nunca será errado, es la esencia del amor cotidiano que ilumina el alma al llenar los espacios del cuerpo, otrora en solitud, para sagaz satisfacer plenamente aquellos anhelos de amar que estaban dormidos, y tener paz.

8-Abr/2022 (Serie Amor cotidiano)