Me gusta quererte

Seguramente más de una vez, en algún momento de ocio, te habrás preguntado sin nada decirme que por qué te quiero.

Y Yo, ¿qué podría decir que no sepas Tú?

Simplemente te quiero a Ti, sin motivos aparentes, tal y como eres Tú.

Solamente agrego que te extraño justo al despedirnos.

Posiblemente no entiendes cómo puedo Yo quererte así, (según Tú) a pesar de ser cómo eres.

Afortunadamente ese es el gran privilegio que tenemos, poder amarnos a diario absolutamente como somos, este amor cotidiano que por nada discute ni riñe nos permite tener paz y ser felices.

Me gusta quererte, me nace de adentro sin hacer ningún esfuerzo, pero desde hace tiempo debes saberlo. Te veo y me animo, te saludo y me pongo contento, te abrazo y me alebreco, te beso y me estremezco. Todo bien, todo en orden, sin presión, sin estrés, sin prisa, pero sin pausa.

A veces te veo empeñada en peinarte, mientras Yo anhelo el pelo alborotarte y jugar con tus risos entre mis dedos tras tu cuello hasta cosquillas causarte, detalle tierno y casual de mi gentil manera de amar que no siempre anticipas, y tus ojos me regañan mientras tu boca se ríe.

Me gusta quererte, aunque no siempre ha resultado ser fácil, pero al final siempre es sensacional. Cuando nos abrazamos tanto sentimos que el silencio nos basta para entender que nada del pasado supera el presente, a ojos cerrados nos miramos por dentro la bondad de cada corazón.

El delicado olor a mujer que emana por doquier al tener tu desnudez y el dulce sabor a placer satisfecho que regala tu cuerpo son ancianas quimeras que en vida jamás soñé conocer, cada sagrado pliegue de tu piel que descubro en la intimidad me sorprende y me fascina de improviso.

19-Abr/2022 (Serie Armor cotidiano)