Me rescató el amor

Me enseñó el Tiempo muchas lecciones, algunas que no quise escuchar y al final tuve que mirar atrás para entender de mis errores las causas y aceptar del presente los resultados, con pena y sin orgullo, mas convencido de que rendirme nunca será una opción.

Entonces, una tarde justo antes del verano me rescató el amor, me dio la oportunidad de conocer a la dama más bella de la comarca, lo que fue todo un honor. Lo mejor: en el proceso descubrir la mujer más sensacional del mundo mundial, que es un privilegio.

Nos rescató el amor sin poner condiciones ni establecer requisitos, y siempre sabia, la Fortuna, dejó que entre los dos fluyera todo sin prisa, pero sin pausa, hasta que sus ojos me miraron de otro modo, hasta que un abrazo del lado izquierdo fue la señal.

Entonces sus labios hallaron mi boca y el sabor de sus besos fue deleite, su aliento fue mi alimento y entre suaves mordidas nos entendimos; ya luego sus manos anduvieron por los entornos de mi cuerpo, excitada mi piel quieta no se quedó y fue maravilloso.

Sin trata de hacer un balance de cuentas, sino más bien resumiendo los placeres, al final encontrar la paz con su compañía fue lo mejor, lo más importante, pues nada vale más que tener paz, y cuando ese sentimiento es mutuo es cuando sentimos la felicidad.

Me rescató el amor, digo Yo, seguramente Ella siente algo similar, somos dichosos y cada día sin vanas ilusiones crece entre Nosotros la confianza, cada vez nos sentimos mejor disfrutando las cosas simples del vivir cotidiano, y claro, gozando de placeres.

26-Feb/2022 (Serie Amor cotidiano)