Ayer, armonía.

Ayer la pasé muy bien Contigo, muy a gusto y todo transcurrió sin disgusto, igual pienso que puedes Tú decir lo mismo, pues entre Nosotros ya no hay supuestos ni sustos, conocimos la armonía el día que aceptamos ser y actuar como es cada cual, y es bonito.

Ayer mucho disfruté de tu compañía, tal vez como nunca antes, pues no habían expectativas ni planes ni afanes, las horas se pasaron sin andarlas mirando, Yo sólo te miraba a Ti, la Dama más bella de la comarca, la Mujer más hermosa del planeta; fue genial.

Ayer, para el deleite de los dedos de cada cual no nos hizo falta usar el peinecito para la barba ni tampoco el cepillo para el cabello, al natural nos dejamos acariciar entre juegos los pelos del cuerpo, un sano preámbulo de mayores pasiones horizontales.

Ayer combinamos sin querer queriendo las golosinas más apreciadas para ver alguna película, osamos comer palomitas de maíz, pistachos pelados y maicitos tostados, y fue simple compartir bocados entre besos salados, hasta que llegaron las galletitas dulces.

Ayer, para el placer puro de dos enamorados adultos, ya maduros, la tarde se hizo noche sin siquiera darnos cuenta y se apagó la claridad detrás de las ventanas, pues no estábamos pendientes de nada más que mirarnos con calma, de amarnos sin ansias viejas.

Ayer respiramos en cada instante un aire diferente, la armonía se apoderó de todos los momentos sin preguntar, la pasamos fenomenal, sin preocupaciones comimos, conversamos, reímos y cantamos; fue uno de esos días divinos que pudimos cultivar la felicidad.

16-Ene/2022 (Serie Amor Maduro)