Aunque hay, no hay distancia.

Aunque no puedo hoy hablarte, porque a mi lado no estás, siempre presumida por demás, donde quiera que vas, casi me parece escucharte entre risas contándome esas cosas bonitas de tu vida, las más alegres. No hay distancia que me borre la melodía de tu voz.

Aunque no puedo hoy mirarte y contemplar cada detalle de tu hermosura natural que a veces con el maquillaje tratas de ocultar, te veo en mi mente y permanezco embelesado. No hay distancia que me haga olvidar la belleza de tu cara ni tu silueta sensacional.

Aunque no puedo hoy abrazarte en persona te abrazo en la distancia sin reclamo, mis ojos cierro sonriendo y a tu lado me hago, en mi pensamiento, pues para abrazarte me basta la energía de tu alma. No hay distancia que afecte un amor maduro, uno verdadero.

Aunque no puedo hoy besarte como el loco apasionado en que me convierto cuando te veo me muerdo los labios a ojos cerrados, acaso creyendo que fuera tu boca que sabrosa me como a besos. No hay distancia que me haga olvidar el dulce sabor de tu boca jugosa.

Aunque no puedo hoy ser el heredero de los momentos más tiernos que viviría tu cuerpo al disfrutar de tus más íntimos encantos con esmero, guardo mis anhelos para cuando te tenga en físico entre mis brazos, al alcance de mis labios y a merced de la pasión.

2-Ene/2022 (Serie Amor Maduro)

Comments

Popular posts from this blog

Me deleito con tu personalidad

Maroteando

El Gato entendió