Los propios errores

Los propios errores

Pasan los días y no paramos de aprender de la vida, del amor, de la gente, y lo triste es que no aprendemos con la experiencia ajena, lo cual nos obliga a cometer los propios errores, y sólo queda la piel como testigo.

“El amor es cosa de dos”, te dije varias veces, pero hasta después no comprendía que solamente Yo sentía alegría de sólo pensarte, de imaginarme tomando tu mano para cruzar la calle. Quizá fue que me pasé de caballero.

Quise ser halcón y volé, quise ser ruiseñor y canté, todo sin poder... las condiciones físicas y el talento son regalos que no están en la lista de navidad, pero cuando Uno se enamora no se fija en nada más. A veces es mutuo el sentimiento, otras tantas apenas ilusión de colores.

30-Oct/2023 (Serie Cortos de un Ermitaño)