Fue sin querer

Creo que fue sin querer, aunque durante el día una y otra vez mucho lo pensé, escribía su nombre en la pantalla y luego lo borraba, bloqueaba el celular y seguía trabajando. Hasta que, ya queriendo al terminal mi día laboral, cuando iba llegando a mi casa decidí decirle un “Hola” y nada más.

Esperé su reacción respirando ansias y cuando al instante contestó amablemente suspiré sonriendo absuelta de pecado.

¡Como es la vida de rara!

Tantas ganas de conversar con Él y el orgullo me calla, me deja sin palabras y en resumen: no sé por qué ó para qué. Yo siempre disfruto hablar con la gente, aunque sí, con Él es diferente.

Es cierto que a veces me dice cosas que decirme no debe, y por ello lo regaño siempre, y también otras veces me cuenta cosas que oírlas no quiero, pero a pesar de ello no considero que tenga miedo de hablarle. Bueno, no será miedo, pero algo pasa, por suelo quedarme callada.

Entonces hoy como manejaba tal vez le hablé y me hice de cuentas que trabajaba. No, no, no, tampoco así... Lo grande de todo es que quizás fue sin querer, pero quiero.

En verdad siempre me divierto cuando converso con Él, aunque no siempre lo acepto.

Quizás fue el calor del verano que distrajo a las Gemelas que andarían tomando el sol, porque ninguna me dijo que le hablara ó que no, y por eso le hablé Yo.

Bueh!

Faltan más días por pasar, quedan más palabras por leer y seguramente mucho por conversar. Interesante será sin duda.

27-Jul/2019 (Serie Wendy)