Leonardo BALDISSERI ALLANIC

No creo hoy conocerte, no puedo, hace más de treinta y cinco años que no te veo, que no sé de Ti, de tus cosas ni de tus quehaceres. Si acaso han cambiado tus gustos lo ignoro, si tal vez ya no ríes de mirarnos lo entiendo, si quizás cierras los ojos en vano lo lamento. Sí, a veces está Uno solo de compañía, mas otras veces se está solo de cariño (lo cual no es agradable), como pudiera cualquiera estar también solo de abrazos ó solo de besos y hasta solo de aquellos placeres compartidos que tanto buscamos cuando están escondidos. Pero ojo, solo de amor nunca se puede estar, porque al menos a Uno mismo hay que amarse para no desfallecer viviendo el presente que no entrega el destino cada día, el mismo que a veces puede ser cruel y otras tantas resulta ser cariñoso y hasta amoroso. Entonces al final estar solo de compañía no es malo, sino que es sólo eso, estar solo, sin compañía humana viva alrededor, sin nadie hablando, sin nadie preguntando, sin nadie opinando. Son sólo

Y así se asomó el Otoño sobre el horizonte, discreto, sin decirle nada al Verano, a quien cansado y todavía sudado se le veía callado recoger del suelo sus pertenencias para irse a otro hemisferio con sus cálidos vientos, mientras los ánimos prestos se disponen para pintar de colores pasteles los cielos y luego dejar a las hojas de los árboles como lindas acuarelas, para coronar la temporada. Se asomó el Otoño sin arrogancia como cada año, dispuesto nueva vez a ser artista cauto y a la vez testigo fiel de las frescas brisas y las suaves lluvias, para ser el dueño de ratos que invitan a descansar del calor recién vivido y brindar alegres por los días tranquilos, por los amores queridos, para amar sin prisa, para gozar sin mirar el reloj mientras la noche dura y la madrugada llega. Sí, ya el Otoño está aquí. 23-Sep/2019

Sin sentirlo la noche se marchó de tu cama, la oscuridad se queda un rato más pero ya sabe tu cuerpo que vino un nuevo día, uno mejor. Mirando las tenues luces que nacen en el lejano horizonte, donde no habían sino sombras, tus ojos van teniendo imágenes y colores sin brillo, que luego ya entiendes. Entonces, de repente miras a tu alrededor sólo para comprobar tus íntimas sospechas, y es que estás solo, realmente estás sólo Tú, apenas Contigo mismo mirándolo todo de arriba a abajo y viendo nada en el silencio. Siempre lo supiste y nunca lo creíste, pero ya es tiempo de ir comprendiéndolo porque solo naciste y solo finalmente quedas a expensas del destino que hoy te sorprende preguntando por alguna compañía, que acaso te pueda dar un poco de cariño y consuelo para más vivir. Revisas curioso tu piel y tu cuerpo, el corazón igual late y el día que nace te invita a salir del encierro para ver los colores del cielo, para oír las canciones de cada árbol con nidos en la vera

Se queda el alma en espera, se queda y no mira hacia afuera, se queda y nadie la vista le enseña, se queda así, como siempre es ella, serena. Nadie llega a pedir un milagro, nadie viene a traer un consuelo, todos pasan de largo como agua de un riachuelo buscando el lejano mar para desaguar y el cauce andado olvidar sin celo. Hoy se viste tranquila el alma de mañana nueva, sin cargar ni una pena se cepilla el cabello, tampoco es que tiene prisa, se viste sola y sin mirarse al espejo sabe que la elegancia es toda de ella, no es coqueta, pero sí es bella. El alma sabe esperar y espera, igual sabe el alma amar y ama, sin embargo, cuando todo es sabido entonces aprende el alma a olvidar y olvida, perdona las horas que pasaron sin dejarnos alegrías, perdona al destino que vino a probar suerte sin tener la certeza de permitirnos felicidad. Al final, cuando perdona el alma ya se calman las ansias, ya no hay dolor ni tristeza, el perdón limpia el corazón por fuera y por dentro, el perdón cambia

Sin mirarme volvió la cabeza para decirme que se marchaba, que no quería fingir una despedida ni albergar misterios en su partida. La noche había sido larga y cansada, por ratos cerrando los ojos para pretender el sueño sin siquiera saber qué llegaría primero, si el rencor ó el perdón, ó acaso sería el olvido. Entonces pasaron los días sin novedad, y fueron semanas y luego meses, sin mirar atrás, sin llamar al mañana, sin buscar los recuerdos que una vez fueron sentimiento y pan sobre la mesa para compartir con Fe. Después la realidad se hacía evidente, clara, sin pronunciar palabra se entendía lo que estaba callado desde antes, sin mirar atrás todo cobraba sentido, incluso aquello que desde el principio se temía y se quería, todo ahora era distinto, pero a la vez verdadero. Sin mirar atrás quedaba un pasado echado a su propia suerte, ausente por demás, dichoso una vez y maltrecho después de tanto querer ser lo que nunca sería, acaso esta vez apenas será el recuerdo de

♥   ¡Oye! Pero... ¿Qué estás diciendo? ¿Acaso me estás pretendiendo, después de tanto tiempo? Ya no estamos para eso. ♣   No. Eso no es posible, ¿cómo podría? Si apenas recuerdo el verde brillo de tus lindos ojos mirando a otro lado para no contarle a los míos los anhelos de tu corazón. Es cierto que un día cuando éramos sólo retoños, hace ya muchos años, pretendí saber del sabor de tu boca y también del calor de tu piel, mas en vano el destino me puso en tu camino porque la suerte fue luego cruel y sin más me enseñó el color gris de tu eterno olvido. ♥   No es para tanto... Exageras diciendo eso de mi olvido, sólo fue la vida que me llevó por otros sitios donde no andabas tú. ♣   Pues creo que nadie hoy conoce el futuro, y yo apenas ahora es que aprendo a vivir el presente, ese que cierta gente entiende que sólo existe en el pensamiento de los viejos sabios de antaño, los que solían sentados sonreír callados mirando el ocaso abrazar el horizonte sin siquiera llorar la caí

Te he visto alegre sonreír, te he visto también de cara triste mirando al horizonte sin decir palabra, y acaso un día te vi andando sereno con las manos sueltas, como contando los pasos que tristes se persiguen entre sí sin salirte del camino azul que te lleva a la meta. Te veo casual pasear sin prisa frente a todos tarareando melodías de romances perpetuos que conoces sin olvido, de alegrías y penas compartidas que cantan y lloran entre besos y lágrimas en las mejillas, que terminan en gritos de placer y gozo detrás de la esquina. Te he visto y te veo, siempre presto con el justo empeño, raudo sigues adelante día a día sin cansancio, buscando el cariño, abrazando el destino, hallando en el camino señales que por amor hacen vibrar el espíritu, que miran el dolor y callan la tristeza, todo para ser mejor. Te he visto y te veo, porque el corazón lo llevas puesto en el pecho y no en los ojos, porque el amor lo llevas suelto en el alma y no atado de las manos, porque tu bondad

Cuando has visto pasar entre días y noches las horas de risas que brillan entre los colores pasteles de cada atardecer, entiendes que todo tiene un momento para suceder y cada compañía se tiene para disfrutar de la vida. Cuando has visto pasar entre noches y días las horas calladas que duermen en cada madrugada esperando el alba para dejar la almohada tranquila, sientes que le faltaba al cuerpo el merecido descanso para continuar. Cuando aprendes a mirar entre los ojos los colores del alma, la forma cómo quiere el corazón, cuando aprendes a oír el canto de los íntimos anhelos que ríen y lloran por las pasiones del cuerpo, entiendes del amor. Cuando aprendes a ver la belleza de adentro, la del corazón enamorado y así la bondad del alma, entiendes que no tiene culpa lo bello y vale más vivir el tiempo abrazados de pecho y espalada con la sonrisa cantando romances. Cuando aprendes a besar sin prisa, a tener en los labios la ternura de unos besos menudos que saben a bien,

Y asumir las consecuencias significa, entender los desacuerdos, aceptar las diferencias, negociar acuerdos, perdonar errores. Asumir las consecuencias significa, comprender tus sombras, perderme en tu mirada, volar con tus locuras, entender tus dudas, derretirme con tus risas, temblar con tus besos, respetar tus silencios, disfrutar de tu alegría. Wendy 11-Sep/2019  5:24 PM

Cada día has de buscar ser mejor en todos los sentidos del vivir cotidiano, mejor mujer, mejor hermana, mejor amiga, mejor profesional, mejor esposa, mejor madre, mejor amante, pero sobre todo mejor persona dando siempre lo mejor de Ti sin esperar nada a cambio. No puede haber nada en este mundo que pueda hacerte avergonzar de ser siempre como eres Tú, quien eres Tú verdaderamente en verdad, como sientes cada vibración debajo de tu piel, lo que sientes de la vida en tu alma, como haces cada cosa tuya y cada una para los demás, todo eso que te hace ser Tú misma te hace también única y maravillosa, bella con y sin luz, imperfecta perfectamente para evolucionar cada día en paz y en armonía con todos los que a tu lado queremos ser felices sin buscar la quinta pata de la gata que nos mira. Tanto es así que esa hermosura tan tuya es tal que lo incluye todo, la belleza y la destreza, la simpatía y la empatía, la fuerza del amor que sana el dolor, la alegría en la tristeza y el cariño

Ella es el brillo en medio de la noche que ilumina la senda de mi camino, ese que tantas veces a oscuras recorrí sin buscar una fuente de luz para que mis ojos pudieran guiar mis pasos, era un camino largo, minado de piedras y zanjas, donde andaba sin saber hacia dónde caminaba, pues iba solo y apenas respiraba en medio del triste cansancio. Ella es la voz viva de tantas palabras sinceras que nunca había escuchado en secuencia durante una noche de conversación, la noche misma que no conoció el cansancio de posturas de antes ni tampoco dispuso los temas que mostraron la personalidad de cada cual, luego nada nos importó, así nada nos importunó y nada bajo el mantel se quedó. Ella es una Hechicera, y es una de las buenas, una de las que te mira y sin hablar te conquista, una de las que te hace sonreír en todo momento, una que me decía conocer pero que en verdad no conocía. Es una Hechicera que con su magia te enamora, porque es su magia la bondad y es el amor la consecuencia de t

Cada día ha sido distinto, evolucionando todos en algo y han sido diferentes pues cada vez ha crecido la palabra y cada vez más el entendimiento se ha adueñado de cada conversación, siempre quedando el corazón latiendo más y más fuerte, ¡y qué bueno! Cada día la palabra crece, la mirada se hace más profunda y busca oír las voces del alma que calladas andaban dentro de cada cual, y parece esto un milagro, pero es real. Shani es una Chica maravillosa, conversar con Ella a cualquier hora y olvidarse de contar los momentos es deleite para la mente, que suelta libre toda palabra cual cálida brisa de verano que encuentra refugio en los oídos de la escucha. A veces hasta cuesta creerlo. Cada día la palabra crece, la voz cambia, se acomoda y se hace franca sonrisa que deviene luego en risa, pues la bondad está presente en todas las letras del vocabulario. Shani es una Mujer hermosa, llena de defectos perfectos, pero no sólo es hermosa por fuera, sino verdaderamente hermosa por

Me gusta que eres consciente de quién eres, cómo eres y cuánto eres. Lo noté la primera vez que Contigo conversé, y el tiempo me va confirmando que no me equivoqué. Me gusta también que sabes la diferencia de ser siempre Tú, aunque a veces parece que no prefieres serlo, acaso como una defensa ante quien no se ha ganado tu confianza. Te digo, me gusta todo, el color de tu piel, los labios tersos de tu boca, cómo tienes el pelo, tu firme caminar y la forma de tus manos. Me gusta tu mirada, la voz de tus palabras y más me gusta tu risa que no oculta las alegrías de cada momento. O sea, me gustas Tú. También debo confesar, sin temor a divulgar intimidades, que mucho me gustan tus besos, la suavidad de tu piel y el olor de tu cuerpo, sobre todo cuando te acercas a Mí hablándome con baja voz, susurrando acaso alguna idea de algún deseo reprimido que debemos atender. O sea, me gustas Tú. Me gustas Tú, quien eres, como eres, cuanto eres, porque siempre eres Tú y no quien los d