Eres Tú esa Mujer

No importa por el mundo dónde vayas

siempre tendrás amistad, compañía.

No importará dónde pares, lo que hagas

siempre tendrás sonrisas y alegrías.

Si acaso ha sido el mar tu confidente

la brisa cálida te hará recordar,

y será el viento frío del oriente

el que todo te haga pronto olvidar.

Sabes de la vida y de las noches,

Yo quiero adivinar tu pensamiento

porque eres una de esas bellas flores

que cautivan a Uno en al momento.

Tus manos son muy suaves y tan tiernas

y cuando ríes con mirar discreto

al caminar entre todos serena

ya no sé cómo guardar el secreto.

Son tus grandes negros ojos, son ellos,

los que dicen todo de tu belleza

porque no sólo son brillantes, bellos,

son también espejo de tu grandeza.

Piensa que por amor

el mundo da vueltas sin parar,

también sabemos que el dolor

nos lleva de la mano al caminar.

Serás una mujer plena, dichosa,

aunque quizás nunca sepas cuánto

porque tu interior es el de una diosa

y tu vida es como un alegre canto.

Sin temores deja que el mundo ría

de aquello que dices y que conoces,

ya sabrás más del amor algún día

cuando te olvides esas tristes voces.

Donde quiera que vayas diga llegas

no dejes que la soledad te llene.

Lo que sea que a todos digas y hagas

que siempre a tu corazón leal llegue.

Esa que siempre lleva la mirada

de frente para todas las cosas,

y que enfrenta con una carcajada

al destino vil que cruel la acosa.

Perdona a las flores, a las estrellas,

tu noble corazón es tan grande

que puede dar tanto amor sin penas

y latir sin cesar, siempre es gigante.

Eres Tú esa Mujer, la del querer,

que llena de virtudes y bondades

es una mujer preciosa de Fe

que me hizo comprender tantas verdades.

Fuiste Tú la dueña de mis escritos

donde estuvo un adiós sin despedida,

un te quiero que nunca te fue dicho

fue en una mirada fugaz, perdida.

13-Sep/1981