Dime, ¿por qué?
Las mañanas aún están frescas...
¿Por qué me dices bellas palabras
que mis oídos hoy no han de oír?
¿Por qué preguntas cosas pasadas
que mis labios no
deben decir?
Calienta el sol la humedad de
anoche...
¿Por qué escribes versos de pasión
que mis ojos no deben leer?
¿Por qué las imágenes de amor
que mis ojos no
deben de ver?
La brisa del Este me huele a
lluvia...
¿Por qué quieres mi abrazo completo?
De repente nos vemos así
no debo suspirar en tu pecho,
¿por qué todo
queremos sentir?
Pues bien, te puedo decir por qué:
Así tal vez por quererte siempre
tu recuerdo no conozca olvido,
hoy no pienses que tu alma me miente
me lo han dicho
tus ojos divinos.
Recuerdos de anhelos y pasión...
¿Por qué tu sabor quieres que pruebe?
Mis labios no lo deben beber.
¿Por qué el fruto de tu piel me ofreces?
Mi boca no lo debe
comer.
Pues bien, te digo ahora por qué:
Porque no tiene culpa lo bello
y no entiende nada de cordura,
porque siempre el sentimiento es dueño
del momento
tierno y la locura.
28-May/2006
Comments
Post a Comment