Sublimemente despeinada
Sublimemente despeinada
Sublimemente despeinada se sentó en la cama estirándose de piernas y cuello, todavía le quedaba alguna prenda íntima puesta por la espalda, entre vueltas por la cama el resto quedó enredada a merced de las sábanas; la felicidad hace que sonría el alma al hacer el amor sin miedos.
19-Ene/2023 (Cortos de un enamorado)
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