Querer y jamás perder

Yo una vez pensé sin así querer

que tenía sin límites que amar

y que lo podía todo querer

par Mí que nada podría agotar

buscando querer y jamás perder

con la suerte tantas ansias de amar.

Cuando callado viví la tristeza

de haber perdido y perder otra vez

fue como perder toda la nobleza,

fue aquel día que tuve que entender

que somos flor de la naturaleza

apenas somos dueños de la Fe.

Del momento tierno y de la locura

comprender viejas palabras con paz

entonces con la certeza oportuna

lo vivido viste el recuerdo y más

y los sueños nos regalan la duda

cual agua que pasa y no vuelve más.

9-May/1993