Para recordar
Quizás llevas la sonrisa discreta fruto de algún pensamiento muy tierno que te llena de una calma serena al escuchar a tu lado un “te quiero”. Será porque la noche hoy es más larga que se oye una y otra vez un “te quiero” cuando ni siquiera hablamos palabra, será porque es un gemido sincero. El murmullo que se anida en tu cama cuando sientes que todo es un misterio un latir que te habla sin decir nada y que luego deja todo muy quieto. Si acaso algún día, no importa cuándo, sientes que se pierden las alegrías de vivir a espaldas del fiero mundo sólo anda y toma al mundo de la mano. Y si tan sólo al despertarnos he sido un caminante furtivo en tu vida que apareció sin causa en tu camino guarda el recuerdo con plena alegría. Será que no siempre es sabio el destino que te guía en la vida cada día por casuales senderos sin camino siempre buscando veraz compañía. Siempre por siempre te recordaré es que viviendo olvidarte no puedo